Las impresoras 3D domésticas podrían convertirse en un importante segmento en el mercado de la electrónica de consumo, generando unos ingresos anuales de 70.000 millones de dólares a nivel mundial, según el último informe de la consultora Strategy Analytics: "Impresoras 3D domésticas: oportunidades de mercado y obstáculos".
El informe analiza las principales barreras para su adopción masiva y presenta distintos escenarios en los que trata de predecir la evolución futura del mercado de la impresión 3D en casa. Según el estudio, en el corto plazo es posible que el sector se desarrolle más despacio de lo que algunos analistas esperan, dadas las enormes expectativas creadas. Pero la demanda se acelerará a partir del 2020 con las mejoras en la tecnología y la experiencia de usuario.
En el escenario de previsión más probable, las impresoras 3D se encontrarían en más del 50% de los hogares de EE.UU. Y Europa Occidental. Y los ingresos anuales globales de ventas de impresoras y materiales relacionados llegarían a los 10.000 millones de dólares en 2024 y 70.000 millones en 2030.
"A pesar de la amplia publicidad en torno a la impresión 3D en el último año, las impresoras 3D diseñadas para su uso en el hogar están solo en el comienzo de su largo viaje hacia la adopción generalizada por los consumidores", dice David Mercer, principal analista y autor del informe. "La industria debe superar una serie de barreras para que el potencial a largo plazo de la impresión 3D como un mercado de consumo llegue a materializarse".
Visto en 3Ders
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